Meditación basada en las enseñanzas budistas del camino del Lanrim Kadampas.
El gran fundador de la tradición kadampa es el maestro budista Atisha. Sus instrucciones nos llevan al camino de la Compasión y la Sabiduría que son las que nos aportan serenidad y felicidad plena en nuestra vida diaria.
Clases de meditación enfocadas en las milenarias técnicas de meditación del budismo.
Seguirás un programa para conocer todos los fundamentos sobre la meditación.
1. Qué es la meditación
2. La postura de meditación
3. Cómo comenzar a meditar
4. Preparaciones para meditar
5. Cómo meditar
6. Practica subsiguiente
7. Programa para la meditación
La meditación: es la mente que se enfoca de manera convergente en un objeto virtuoso, cuya función es hace que la mente esté tranquila y en paz. Cada vez que meditamos estamos realizando una acción mental que nos hará experimentar paz interior. Normalmente tenemos perturbaciones, durante el dia y la noche durante toda la vida. No obstante en ocasiones gozamos de paz interior de forma natural, esto sucede porque en vidas pasadas nos hemos concentrado en objetos virtuosos.
El objeto virtuoso es el que calma nuestra mente cuando lo analizamos y nos concentramos en él. Si nos concentramos en un objeto que nos genera una mente inquienta como el enfado o el apego, significa que este objeto es perjudicial para nosotros.
En la primera etapa de la meditación trabajaremos en disipar las distracciones para lograr claridad y lucidez mental.
Las realizaciones internas no aparecen por arte de magia, para ello adquiriremos una experiencia profunda en la meditación. Al igual que un agricultor tiene que arar la tierra antes de sembrar las semillas, nosotros prepararemos la mente para recoger una cosecha de realizaciones espirituales.
En la practica preliminar es purificar la mente de las faltas acumuladas, es como limpiar la tierra de piedras y malas hierbas.
Al terminar cada sesión llevaremos acabo la practica subsiguiente, que consiste en no olvidar el objeto de meditación en la vida cotidiana, para seguir generando esa actitud positiva que hemos generado y cultivado en la sesión formal de meditación.